Nuestra primera protagonista es
Emilia Pardo Bazán una destacable novelista del siglo XIX que introdujo el naturalismo
en España.
Nació en La Coruña el 16 de
septiembre de 1851.
Gracias a su madre adquirió
desde pequeña curiosidad por la lectura, tanto que renunció a los rituales de
la época (las mujeres tenían que aprender a tocar un instrumento musical).
A los 16 años se casa con José
Quiroga y junto a él y su familia se marchará a Madrid ya que su padre José Pardo
es elegido como diputado, pero pronto siente desilusión por la política y toda
la familia decide viajar por distintas ciudades europeas.
En 1876, y coincidiendo con el
nacimiento de su primer hijo, publica un libro de poemas titulado “Jaime”
y tres años después su primera novela “Pascual López” cuyo protagonista es un
estudiante de medicina influenciado por las lecturas de Pedro Antonio de
Alarcón y Juan Valera.
De esta primera etapa hay que
destacar también “Con un viaje de novios” y “La tribuna”.
En 1882 comienza sus
colaboraciones en la revista La Época,
donde reflexiona acerca de Zola y la novela experimental.
Fruto de estos artículos saldrá
a la luz en 1883 “La cuestión palpitante”.
Su marido, horrorizado por el
escándalo que ese libro generó, le pide a su esposa que abandone la escritura.
Pardo Bazán lejos de obedecer, continúa desempeñando su labor
y se separará de él dos años después.
Durante ese tiempo publica “La ama joven”
donde se tratan las crisis matrimoniales.
Entre 1886 y 1887 escribe su
obra más conocida “Los pazos de Ulloa” y su continuación “La madre naturaleza”, donde
retrata la decadencia del mundo rural gallego y la aristocracia.
Entre sus cuentos y relatos cabe
destacar:
“Cuentos de la tierra”, “Cuentos escogidos”, “Cuentos de Marineda” o “Cuentos
sacroprofanos”.
En 1892 funda y dirige una
publicación titulada “La biblioteca de la
mujer”.
Durante ese tiempo asiste a
congresos pedagógicos en los que denuncia las desigualdades educativas que
existían entre ambos sexos e intentará sin éxito el ingreso en la real academia
de Concepción Arenal.
Tampoco admitirá la institución
a Gertrudis Gómez de Avellaneda ni a
Pardo Bazán (a quien se le rechazará su ingreso en tres ocasiones).
Fue la primera mujer en lograr
la Cátedra de Literatura Neolatina en la Universidad Central de Madrid, pero
solo un estudiante asistía a sus clases.
Fue objeto de burla por parte de
los intelectuales de la época hasta el punto que Valera en cartas que escribe a
Menéndez Pelayo llegará a decir de la escritora gallega que iba a Francia para
frotarse con los naturalistas.
Tampoco Pereda será piadoso pues
afirmaba que si a Doña Emilia le pedían que bailara en cueros lo hacía.
Pardo Bazán murió el 12 de mayo
de 1921 meses antes de cumplir los 70 años.
Se ha descubierto en 2012 que la
autora coruñesa escribió a los 13 años una novela titulada “Aficiones
peligrosas”. Por lo visto, esas aficiones
eran la lectura y la escritura.
Este es un claro ejemplo de una mujer adelantada a
su tiempo. Demostró que una mujer no debía arrodillarse ante nadie y nos ha
dejado un legado literario que perdurará siempre.
En colegios e institutos es analizada como una
autora anclada en sus raíces gallegas, pero hay una Pardo Bazán más profunda y
reivindicativa que no destacan los libros de literatura. Por eso queríamos
mencionarla en este blog.
Fernando Gay
Bibliografía: Wikipedia; La historia de cada día (programa
de radio 5 emitido el domingo 7 de octubre de 2012)
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